que bonito el Convent de Sant Agustí… que sitio más chulo para hacer conciertos… que bien suena… tiene sillas por si te quieres sentar y calefacción… y está a 15 minutos de casa paseando… que lo mejor después de un buen concierto es volver a casa paseando por un Eixample semi-desierto… Como me esperaba… poquita gente… pero no importa… Gracias a 24 Hour Party People sabemos que Tony Wilson dijo aquello de… En los momentos importantes de la historia siempre hay poca gente, ¿cuántos había en la Última Cena, trece?… no se si lo de esta noche pasará a la historia… a mi historia seguro que sí… en cualquier caso yo he salido muy contento… con mi copia de Who Cares? en el bolsillo… y con el «sed felices vosotros que podéis…» que recita Anki Toner al final de I know I’ll never be happy, en la cabeza…
Luego en la calle enciendes el iPod y como está en modo aleatorio… te sale Joe Crepúsculo graznando «diririrá diririrí siempre quiero estar feliz…» y no sabes muy bien… no sabes…
la foto no es tan buena como la de Carmen Milla… pero es mía…