
Que por la noche nos acercamos al Freedonia que actuaba Kikí d’Akí y bueno… Que fue uno de las cosas más bonitas y emocionantes que he visto en mucho tiempo. Que cantó sus maravillosas canciones de toda la vida y un montón de fantásticas versiones… De Berlanga, de Vainica Doble, de Françoise Hardy… Y entonces te das cuenta (otra vez) de lo buenísimas e importantes que son.
El talentosos Evripidis and his Tragedies, que hizo de anfitrión, estuvo muy divertido y sus canciones de synth-pop melancólico sonaron a gloria, como siempre. Espero ansioso su nuevo disco.
El bueno de Atienza le consiguíó a Eva el setlist.
Deja una respuesta